Cuando tienes el placer de conocer a personas como Nati y Manu, das GRACIAS, así con mayúsculas por dedicarte a esto del mundillo bodil…

Se casaron el 10 de Septiembre de 2016 en Cangas del Narcea, aunque su historia de amor surgió seis años antes en la Noche de los Fuegos de Gijón, fue su más bella casualidad, como dice Nati, pues ella es de Cangas del Narcea y Manu de Piedras Blancas. Casi cinco años más tarde, en los Bufornes de Pría y bajo las atentas miradas de todos los turistas que por allí había, Manu hincó rodilla en suelo y con anillo en mano le pidió matrimonio, evidentemente la respuesta fue un Si.

Fue entonces cuando empezaron a preparar su día, su gran día, en el que no dejaron nada al azar, ni el más mínimo detalle.

El vestido que lució Nati el día de su boda fue un regalo de sus padres, ella quería algo que se ajustase a su estilo y no dudó un sólo instante en acudir a la diseñadora Cristina Pascual, que también diseñaría el dos piezas que llevaba su madre y el tocado que llevaría en el momento del baile, ya que para la ceremonia lució una preciosa e impresionante corona de Tocados Burlesca , los pendientes eran unas «Rosas de Francia» pertenecientes a la madre de Manu, que lamentablemente dos meses antes de la boda falleció, por lo tanto llevaban una gran carga emocional. Los zapatos fueron regalo de las amigas de Nati, unas sandalias de Jimmy Choo en tonos dorados.

De la peluquería se encargó Nuria Velasco realizandole un recogido espectacular. El momento del maquillaje, pedicura y manicura fue uno de los momentos más especiales que vivieron Nati y su madre, ya que fue esta última quien se encargó de ello, pues regenta el Salón de Belleza Carmen imaginaros a la pobre qué nervios, eso sí, la dejó preciosa.

Manu iba vestido con un chaqué de tres piezas en tono azul, con corbata y pañuelo todo ello de la Sastrería Boutique Verano Ceremonias, los zapatos eran de Ángel Infantes y los gemelos y el reloj de pedida de Armani.

La ceremonia fue en el patio del Ayuntamiento de Cangas del Narcea, en la que hubo varias lecturas de sus amigos, una de ellas muy especial, de una de las mejores amigas de Nati y testigo del enlace, tomando un fragmento de «El Principito», estuvo amenizada por la banda de gaitas «SON de Lletitariegos». Como culminación final de la ceremonia, y como no podía ser de otra manera, siendo y estando en Cangas, hubo una pequeña «Descarga» a cargo de Pirotecnia Pablo, que sorprendió, sobre todo, a los invitados que nunca habían estado allí.

Posteriormente se trasladaron al Parador Nacional Monasterio de Corias, comenzaron con un cóctel en el que no faltó la Sangría de Sidra ni las Caipirinhas (típicas de las fiestas en Cangas) y amenizado por el Cuarteto Arpeggio. La cena todo un éxito que disfrutaron todos los comensales, Candy Bar con chuches, cupcakes y donuts, un Cigar Bar en el que no faltó ninguna clase de tabaco, incluso de sabores y para colofón el baile, que abrieron con «Time of my Life» de Dirty Dancing, una de las pelis favoritas de Nati y que seguramente todas las chicas, hemos intentado en alguna ocasión simular… La fiesta estuvo amenizada por un Dj de lo más «enrollado» incitando a todos los invitados a no parar de bailar, así que la fiesta se alargó hasta las siete de la mañana, ayudados de las chanclas (tanto para chicas como para chicos) que estaban preparadas para la ocasion, y con las divertidas chapas personalizadas.

Toda la decoración floral, tanto del Ayuntamiento, como del Parador y el ramo de la novia, corrieron a cargo de Flores La Plaza, que no pudo dejar rincones más bonitos.

Toda boda que se precie tiene que tener unos detalles a la altura de sus invitados, pues bien, mis haditas de El Botón Rosa prepararon unas lágrimas de felicidad para los momentos más emocionantes de la celebración, así mismo no podían faltar unas cestas en los baños con los imprescindibles para estar impecable hasta el ultimo instante. Los regalos que también prepararon con todo su cariño fueron unos Kit de Gin Tonic para los chicos, con su respectivo Kit Antirresaca, porque ya os decía en un principio que Nati y Manu habían pensado en todo, y para las chicas un Kit de Belleza Natural con jaboncito artesano, bálsamo labial y sales de baño, con su Kit Antirresaca también, todo ello personalizado con unas etiquetas ideales como toda la decoración e invitaciones. Para los peques un montón de brochetas de chuches y una mesa espectacular con juguetes de los de siempre (peonzas, yo-yos, combas…) y cámaras de fotos con las que hacer de paparazzis de los mejores momentos de la Boda. Nati tenía muchas amigas que habían sido mamás recientemente o lo iban a ser en breve, por lo que para ellas tampoco faltó un regalazo, una bolsita-saquito con un babero, una vela aromática con su etiqueta y un mini osito de peluche.

Para las fotos del gran día, así como para la Post Boda, que realizaron en el Aeródromo de La Morgal, contaron con Tatiana Fotógrafos que nos ha dejado estas maravillas para el recuerdo.

¿No os había dicho que en esta Boda no habían dejado nada al azar? Yo sigo pensando que estos dos son de anuncio, o no?

Tania.