El sueño de Lucía

 

Lucía, desde bien pequeñita, tuvo muy claro como quería que fuera su gran día y que su boda sería en el mes de octubre.

Normalmente las novias suelen tener peferencia por los meses de verano y pimavera, el sol y el calorcito parecen aimar a la celebración de un día tan especial, sin embargo Lucía prefirió tener una boda de otoño.

Un año y medio antes del día B, tras la pedida de mano, comenzaron los preparativos, Lucía los vivió con total dedicacion y mimo.

Los preparativos

El día 6 de octubre del 2018, amenazaba lluvia, pero como dice el refrán «Novia mojada, novia afortunada» así que sin más, empezaron a disfrutar del día.

Lucía y su familia se prepararon en el Torreón del Castillo de la Zoreda, allí llegaron Barbareando para peinarlas y Lorena Carbajal para maquillarlas. Mientras Mercedes Blanco empezaba a fotografiar esos instantes y David López Dalton a dejarlos grabados en su cámara.

Hacia el altar

Desde pequeña, Lucía, siempre fue muy nerviosa, y me lo demostraba en cada una de nuestras reuniones, pendiente siempre de todas las cosas y con miedo a que no pudiera disfrutar de su boda como ella quería, pero al final no fue así, acompañada por su padre se dirigió a la iglesia en un pecioso Rolls Royce de Astur Car.

Iba preciosa con un vestido de Nicolás Costura, zapatos Jimmy Choo, pendientes de valor sentimental, regalo de su abuela y un precioso tocado de Pamela de la Colina.

Se bajó del coche tranquila, feliz, acompañada de los niños de arras, vestidos de Gretel viendo a todos sus seres queridos esperándola en su parroquia, a Jaime, emocionado en el altar con un chaqué de Sastrería Plácido y la sonrisa inolvidable de su madre.

A la salida de la ceremonia les esperaba un Coro Rociero del Principado de Asturias que posteriormente se trasladaron al Castillo de La Zoreda para acompañarles también durante el aperitivo.

La lluvia

La lluvia hizo su aparición así que la sesión de fotos con Mercedes Blanco, tuvo que hacerse prácticamente en interiores.

La entrada

La entrada al salón para disfrutar de la cena la hicieron al ritmo de la canción «Marry you» lo que animó a lo invitados.

La decoración

La mesa presidencial tenía un espectacular montaje a manos de Pando Floristas.

Tras la cena se hizo la entrega de regalos, con dos muy especiales, el ramo de La Flor de Cervantes para su madre y una réplica para su mejor amiga, que es como su hermana.

Empieza la fiesta

Llegó el momento del primer baile, que abrieron con «la traviata» y posteriormente se incorporaron sus padres. A partir de ahí la fiesta fue amenizada por la Orquesta Dominó que se prolongó hasta las 5:30 de la madrugada y para la que Lucía se cambió de vestido, esta vez de la firma Uterque, menos mal que le colocamos un rinconcito para que las más bailongas no tuvieran al día siguiente dolor de pies…

La guinda de la fiesta

En la terraza estaba nuestra RetroCaravan El Botón Rosa como el photocall «súper cuki» (palabras textuales de Lucía) con el que la gente lo pasó en grande.

Al final, ni la lluvia ni el mal tiempo pueden hacer que tu día pierda un ápice de magia, así que si llueve, que llueva, bailamos sobre los charcos!

Tania.